Por tercer año consecutivo les
presento las desdichas del año.
Soy un incompleto, un número
impar… esos tres puntos suspensivos. Soy el verbo perder conjugado en pasado,
presente y posible futuro.
Soy una “ese”, una “i” y una “ene”:
Sin[empleo] Sin[moral]Sin[sentido]Sin[novio]Sin[fe]SIN fin de etc… la que quiso,
quien pudo y no fue, la que era, fui un te amo, dos te odio, infinitos te
extraño, una verdad muchas mentiras, soy la que lloró después del sexo, pesimista empedernida, quien está de bancarrota, la ex novia, una equivocada,
arrepentida de una tarde de alegrÃas, sigo siendo el mes de Marzo… este bendito
año de Marzo. Una incógnita en espera. De panadera a repostera, de periodista a asistente veterinario,
de novia perfecta a la amante veinteañera, de ser un todo a un nada… un error.
Dueña de gato a dueña de perro,
de gorda a flaca, de rubia a morena, de celosa a loca… incorrecta, indecisa, insegura,
imperfecta, irremediablemente irreversible. Me convertà en el compendio de los
defectos de alguien, en eso que dicen que te conviertes cuando no ves, no oyes
y sientes cuando no hay nada que sentir. Un año perdido, otro año perdida.
Querido 2012, gracias por nada. Espero
que el 2013 me dé más de lo que me quistaste y se lleve esta copia irreconocible
de quien este año fui.
Enjoy*